Este artículo es acerca de Grupo Pro Sayulita (GPS), una organización local mucho mejor conocida por los residentes de Sayulita que por sus turistas. Si, claro, algunos locales dicen que son ellos quienes pasan la charola para recabar fondos cada primavera y se llevan todo nuestro dinero. ¿Para qué? Bueno, para mucho, y mucho de ello afecta a los visitantes de corto plazo también, así que esta historia va para todos, residentes y visitantes por igual. GPS ha cumplido siete años de vida, tiene 200 miembros regulares y se ha convertido en la organización que se distingue por lograr que las cosas se hagan.
¿Qué cosas? Bueno, la respuesta corta es esta: la planeación y fondeo de GPS ha ayudado a iniciar y mantener sufragando lo siguiente:
–recolección y reciclaje de basura a través de Sayulimpia, que a pesar de ser un poco errática, casi siempre funciona muy bien.
–Nuestro centro de reciclaje, que inició operaciones con ayuda de Sayulimpa, ahora es capaz de pagar la renta de la casa contigua de modo que la familia que la habita puede operar el negocio.
–GPS paga la renta del espacio que ocupa la policía turística turística y ayuda al fondeo de vehículos, alimentos y otros gastos indispensables.
–GPS organizó la adquisición de los camiones de bomberos traídos del estado de Washington y paga la renta del espacio que ocupan los bomberos en el mismo edificio que la policía turística. Los bomberos también operan como personal para emergencias médicas, acortando de manera crítica los tiempos de respuesta -en hasta una hora- en favor de residentes y visitantes.
–GPS ayudó a organizar y arrancar el grupo de voluntarios que mantiene limpias las calles. Sayulimpia, cuyos miembros son vistos por el pueblo en camisetas verdes rascando el barro de las calles, levantando basura en la playa y sí, pidiendo donativos, ya que no son asalariados.
–GPS ayuda a cubrir costos básicos de operación en la Casa de la Cultura durante la temporada baja, cuando el Mercado del Pueblo no está abierto.
Como es evidente, lo que GPS realiza no es dramático, divertido o sexy, pero resulta verdaderamente esencial. Los servicios que organiza y ayuda a fondear son críticos para la existencia de nuestro pueblo como un lugar deseable para vivir y visitar. Sayulita sería un lugar mucho menos civilizado de no ser por el trabajo que GPS realiza continuamente. tal vez otra organización, persona o partido político podría hacerse presente y tomar responsabilidad de estos básicos, pero aquí y ahora, y durante los últimos siete años, en Sayulita, Grupo Pro es quien está a cago del espectáculo cuando de servicios primarios se trata. En México, cabe recordar, estos servicios no siempre están garantizados ni son fáciles de adquirir.
Así que pensamos que era tiempo para que SayulitaBeach.com prestara un poco de atención a Grupo Pro Sayulita. Entonces nos pusimos en contacto con Nick Sherman, quien ha vivido aquí por media docena de años y encabeza GPS desde el año pasado, para saber qué nos puede decir sobre el presente y futuros planes para grupo.
Primero, dijo él, visiten por favor nuestro sitio web -cuya nueva versión, nos promete, saldrá muy pronto- para que puedan conocer el trabajo por ustedes mismos. El sitio es prosayulita.org, y es aquí donde podrán encontrar todos los detalles sobre GPS; quiénes la dirigen, la forma de organización y lo que hacen con el dinero.
Y hablando de dinero, para quienes tengan preguntas sobre su destino, Sherman nos comenta que publicará en el sitio las cuentas de cada peso que entra y sale de sus arcas. También nos dice que el presupuesto será transparente y deberá crecer, ya que las necesidades rebasan lo ejercido en años anteriores. Además de borrar del nombre la palabra “Grupo”, para dejar simplemente ProSayulita como inicio de su campaña de renovación de imagen, Sherman tiene la intención de solicitar -no exigir o requerir- que todos los negocios y propietarios de casas contribuyan. Así el presupuesto, que siempre queda corto, se ensancharía y reduciría la presión sobre los eventos de alto perfil como cenas y subastas anuales de recaudación de fondos. así, próximamente, Sherman solicitará a loa propietarios de casas una contribución de $30 dólares por mes o $365 dólares por año, y a los negocios alrededor de $450 dólares por año. Los pagos podrán realizarse en el sitio web con tarjeta de crédito, una vez que la nueva versión esté funcionando.
Para aquellos propietarios de casas y negocios que palidecen ante la idea de semejante suma, consideren el tipo de impuestos que estarían pagando por esas propiedades si estuvieran allá en el norte; este dinero va para servicios básicos que GPS está tratando de proveer aquí. Como todos sabemos, los impuestos a la propiedad son muy bajos o virtualmente inexistentes en México, así que por un dólar al día la gente estaría recibiendo un buen valor por su dinero. Obviamente, una mensualidad así está muy por debajo de lo que la mayoría de los propietarios de casas obtienen por la renta de una sola noche. Considerando la mejor calidad de vida que ofrecen estos servicios, el precio es bastante justo.
Sherman no puede, ni intentará obligar a nadie al pago, pero publicará en su nuevo sitio web dos listas: una con los nombres de las personas que hayan hecho su contribución anual y otra con los nombres de aquellas que no. así de simple.
Señala Sherman un ejemplo de cómo las cosas han cambiado mediante las contribuciones a ProSayulita, la situación de los niveles de criminalidad. A pesar de que muchos crean que la reducción del 90% de la criminalidad se debe a que algunos malotes le patearon el trasero a otros más chiquitos para que el pueblo estuviera más tranquilo para todos, lo que es imposible de comprobar. Cierto o no, personalmente me siento más un poco mejor teniendo a la policía turística enclavada en sus cuarteles a la entrada del pueblo, a unos pasos de la central de bomberos; y es reconfortante saber que patrullan las playas en sus cuatrimotos.
En cuanto a tener personal de emergencias médicas aquí mismo en pueblo, ¿qué podría ser más útil y tranquilizante que eso? Bueno, algunos salvavidas en la playa también serían de ayuda, y Sherman dice que el grupo ya está trabajando en eso también. De igual modo trabajan en recaudar los fondos para un andador peatonal junto a la carretera a Punta Mita, que correrá desde el entronque de la escuela secundaria en la salida sur del pueblo hasta la carretera 200. También ayudan a fondear el Campamento Tortuguero Sayulta, que a evolucionado hasta ser una institución viable y una atracción turística maravillosa en la playa norte de Sayulita. La lista no parece muy larga, pero es del tipo de cosas poco glamourosas e indispensables para mantener al pueblo marchando sobre ruedas.
Para el futuro, y dada la corta vida de los comités de nueve personas electos para ProSayulita, Sherman desea fondear (con parte de las mismas cuotas anuales mencionadas) un cargo permanente de director ejecutivo, con un mexicano al frente, capaz de crear un plan de largo plazo para el pueblo. Esto hace sentido, ya que Sayulita está destinada al crecimiento, y a seguir atrayendo a miles de visitantes de los Estados Unidos, Canadá, Asia y Europa, quienes encuentran un destino vacacional irresistible en nuestro pequeño pueblo.
Sherman invita a todos los residentes a unirse a la organización, o al menos pagar las cuotas. Después de todo, como él señala, “en los Estados Unidos uno ya no siente que hace la diferencia, pero aquí, dando un poco de tiempo, recursos o dinero, puedes realmente lograr un cambio considerable.”
Visita prosayulita.org para contribuir.
